Por: Ch.Gt / Fotografía: Boris De León.

Conocida también con el nombre de Nuestra Señora del Pilar de Zaragoza, la iglesia de Capuchinas representa el último respiro del estilo barroco en la arquitectura que se desarrolló en la Nueva Guatemala de la Asunción.

Una transición del barroco imperante en La Antigua hacia el neoclásico, el orden que imperó a partir del traslado de la ciudad al Valle de la Ermita en 1776.

Una muestra de éste estilo es su fachada con un conjunto de columnas almohadilladas de basas serlianas, más su composición vertical dividida en tres calles y los dos cuerpos que componen su sentido horizontal, además un remate superior. Y una ventana central de ocho lados dispuesta en el segundo cuerpo.

Un estilo que extendió el arquitecto Bernardo Ramírez, y que se asemeja entre el diseño de La Merced y la Catedral de Santiago, de donde se puede inferir la participación de éste arquitecto en dichas obras.

Convento e iglesia
Con el traslado de la ciudad al Valle de la Ermita, a las monjas franciscanas capuchinas se les asignó un solar hacia el oriente de la plaza central, lugar donde hasta hoy solo se conserva la iglesia.

El convento se perdió debido a la expropiación de la reforma liberal de 1871 y los terremotos de 1917 y 1918.

Su construcción empezó en 1785 y fue bendecida el 7 de agosto de 1789.

El techo está cubierto en su parte interior con madera estilo mudéjar. Y en la parte superior de la entrada tiene un entrepiso dedicado para el coro, al cual se ingresa por un conjunto de gradas de forma helicoidal.

El templo tiene en sus paredes seis hermosos retablos e imágenes barrocos provenientes de Santiago de Guatemala, en donde se desarrolló principalmente dicho estilo, principalmente los retablos de San Antonio, la virgen de Guadalupe, de Dolores y Santa Ana.

Es oportuno mencionar que las dimensiones de nichos y hornacinas son exactamente iguales a los de la iglesia de La Antigua Guatemala, lo que demuestra que este templo se construyó para dar cobijo a las obras que allá existían.

En el altar mayor, diseñado en la Nueva Guatemala con estilo neoclásico, se encuentra la virgen del Pilar de Zaragoza, patrona del templo; la acompañan los arcángeles San Miguel y San Rafael.

Una imagen muy venerada especialmente el domingo de ramos —día que sale en procesión desde 1948—, es la de Jesús de las Palmas (Jesús de la Borriquita) que representa su entrada triunfal a Jerusalén. Esculpida por Raymundo Vielman a finales del siglo XIX.

Le anteceden en la procesión los doce apóstoles. Jesús de las Palmas fue consagrado el 23 de noviembre de 2008 por monseñor Rodolfo Quezada Toruño.

A la memoria de quien fuera su benefactor, en el templo de San Miguel de Capuchinas está sepultado el arzobispo Cayetano Francos y Monroy (1779-1792).

Capuchinas en Santiago de Guatemala
La historia de la congregación Capuchina se inicia en Santiago de Guatemala con fundación de su monasterio el 20 de marzo de 1726. A la llegada de las cinco fundadoras desde Madrid a ésta ciudad se hospedaron en el convento de las Carmelitas.

El obispo Nicolás Gómez de Cervantes eligió como primera abadesa a sor María Luisa, cargo que había ocupado en Madrid; como vicaria fungió sor María Serafina; y para el torno —muro del monasterio de clausura que al mismo tiempo aísla, pero que también permite la comunicación con el mundo exterior— fueron elegidas las madres María Bernardina y María Mónica; como maestra de novicias fungió María Magdalena.

Y el obispo Juan Gómez de Parada construyó un convento e iglesia que se inauguró en 1736, pero que quedó destruido con los terremotos de 1773. Trasladándose en 1779 a un lugar provisional en la Nueva Guatemala de la Asunción, donde diez años más tarde el arzobispo Cayetano Francos y Monroy consagra el nuevo templo.

Iglesia Capuchinas
Está ubicada en la
10ª avenida y 10 calle de la zona 1.
Tel: (502) 2238 2126